Amor propio

Hemos tenido una semana sin nuestro Colo-Colo pero con la tranquilidad de haber tenido un alza en el juego, sobre todo en los resultados.

“Autor | Rodrigo Gallegos Follow @Roidrigo”

Colo-Colo enfrentaba una semana dura. En 10 días tenía que medirse ante Wanderers, Huachipato y Universidad de Chile, con la obligación de sacar buenos resultados. Los antecedentes no eran buenos, seguíamos en el fondo de la tabla y con un juego no muy prolijo; sin embargo, hubo un cambio de switch que permitió un notorio repunte.

Todos sabemos los resultados de esos juegos y me quiero detener en el cómo se gestó este repunte. Si bien hubo una mejora en lo táctico, pareciera que los jugadores tuvieran otra actitud y eso es precisamente a lo que me quiero referir.

Cuando las cosas no andan bien, cuando el trabajo no da frutos, hay veces que es necesario poner algo más. Es necesario poner algo que no es talento y que tampoco es trabajo. Es necesario poner algo de amor propio y amor por la camiseta que se está vistiendo. Y eso, al parecer hubo de sobra en la semana que acaba de pasar, se notó un cambio de actitud que todos agradecemos.

Los jugadores se dieron cuenta de que con lo que había no bastaba y seguramente más de alguna conversación hubo en la interna. Pareciera que todos, incluso los más criticados, hicieron un mea culpa de la situación en la que estábamos inmersos y decidieron, tanto por el bien de ellos como del club, poner ese poquito más que se necesitaba. Es el caso, por ejemplo, de Ramón Fernández.

El 10 de Colo-Colo ha sido duramente criticado por su intrascendencia, pero su partido ante la Universidad de Chil fue diametralmente distinto a lo que venía haciendo. Fue como si se percatara que con su talento y su juego no bastaba y sacó lo que mejor tiene para poder demostrar que es el jugador que el equipo necesita y qué mejor que ante su ex equipo.

Esperemos que se siga en la senda triunfal, que cuando no baste el talento y el trabajo, los jugadores pongan ese poquito más, ese amor propio que deben tener por su profesión y su camiseta. Que si se pierde, se pierda poniendo todo, con garra y por sobre todo el coraje que caracteriza a los equipos de Arellano; siempre hacia adelante.