|COLUMNA| El poder de un plantel

Autor | Nicolás Basaure Follow @nbasaurev

La lamentable lesión sufrida por Mati Zaldivia el pasado miércoles en el partido de ida por la fase 2 de la Copa Libertadores frente a Botafogo de Brasil, no hizo más que acrecentar esa idea que vengo transmitiendo hace ya varios meses, este Colo-Colo más que un equipo es un gran plantel, y no lo digo simplemente por la calidad futbolística  de cada uno de sus jugadores y lo que pueden lograr en su conjunto, sino por algo más importante aún, que es su condición de grandes personas y mejores compañeros. Basta con recordar el apoyo transversal recibido por el trasandino de parte de cada uno de los integrantes de la plantilla, y la retribución de este acompañando a sus compañeros en su debut por el torneo Nacional  para darse cuenta que las bases en las cuales se está formando el plantel están hechas de sólidos cimientos.

Este concepto de gran plantel se ve enriquecido con la presencia de referentes, quienes se han transformado en los principales difusores de la mentalidad  ganadora y luchadora que nos ha caracterizado históricamente como club; como no va a ser motivador ver a la leyenda actual de Colo-Colo, Esteban Paredes, entregarse a no dar más y ser quien tome las banderas para llevar al equipo de sus amores al triunfo, sus asistencias y goles no son más que el reflejo de su amor por la Institución y un ejemplo para quienes recién comienzan su carrera o para quienes recién se están integrando al cuadro popular.

No habrán nacido con la camiseta blanca, pero jugadores como Villar, Barroso o Zaldivia son ejemplos de lo que es empaparse del amor por una camiseta; sin lugar a dudas ya son parte de nuestros corazones y porque no decirlo también parte de la gloriosa historia del club.

Podremos no tener los mejores jugadores del continente, no contar con contrataciones bombásticas o no estar dentro de los favoritos en la Libertadores, sin embargo este Colo-Colo con lo que ha mostrado y con lo que es, está para pelearle a cualquiera y porque no decirlo, también  para llegar muy lejos en este que es nuestro gran sueño.