|COLUMNA| Paredes Locura

Soy de una generación en donde se me habla de que no conocí a los grandes ídolos de Colo-Colo, que todavía no nacía cuando ya existían grandes símbolos y muestras de coraje dentro del equipo más grande de Chile. Aún no nacía cuando se jugó y se ganó la Libertadores de 1991. Siempre me dicen: “no conociste a los grandes”.

Autora | Claudia Tapia

A toda esa gente les digo hoy, que sí, conozco a un grande, un Master, un crack, un guerrero, un hombre que no tiene miedo si de mojar la camiseta significa, quien lucha partido a partido por dejar bien parado a Colo-Colo y dejar en claro quien es Chile. Cuatro palabras, un significado, un sentimiento, una pasión: Esteban Efraín Paredes Quintanilla.

No sé cómo empezar, son tantas cosas que quisiera decir sobre este gran jugador, el bendito del área, albo de corazón, quien no tiene pelos en la lengua, es más, prefiere actuar antes de que irse en palabras, más que llenarse la boca de metas, él se dedica a cumplirlas.

¿Cuantos eran los que lo querían sentado en la banca?, que ya estaba “viejito”,  el famoso hogar de cristo y cuanta estupidez que se le han ocurrido tanto a hinchas de Colo-Colo -muy originales-, como a otros que, para variar, se encuentran preocupados de papá.

Esteban Efraín Paredes Quintanilla de 36 años, hoy en día se ha convertido en ese jugador símbolo e ídolo, que levanta a un equipo solo, que levanta a su gente, que pese a todas las críticas y las cosas que se hablan de él, decidió dejar todo eso de lado y demostrar con hechos, con goles, con talento, con calidad, que están totalmente equivocados.

Él es la muestra de que solo con actitud, confianza y seguridad, sin importar los demás factores como edad, salud, etc… puede lograrlo todo y creo que lo dejó claro en el encuentro del Sábado.

Sábado 4 de febrero, primer partido del campeonato de Clausura, disputado ante la Unión Española en su estadio. Colo-Colo mostró un juego confiado, correcto en todas sus líneas, con un Fernández, Paredes y un Vilches (sorpresa), ansiosos de anotar… Paredes sin más fue quien destacó en el encuentro, ya que concretó dos tremendas habilitaciones y para culminar la jornada nos entregó un bendito y hermoso gol.

Es que antes (sí, antes), presentaba un juego lento, se dedicaba solo a eso: recibir el balón y hacer la jugada gol del partido. Pero hoy, es otra cosa, se inundó de la pasión . Esteban Se desenvuelve por toda la cancha, alcanza rapidez, sale a buscar el balón, centros, pases cortos y largos; precisos, correctos, se da hasta lujos de repente y le salen re bien les diré . Hoy Paredes es más que un simple “delantero”.

Soy feliz de poder contar con eso, de que se ha convertido y hoy es Ídolo Vigente del Cacique, queda Esteban para rato si no, véanlo jugar, vean su rendimiento, su pasión y me entenderán.

Me enorgullece contar con esta leyenda, a quien vi crecer en Colo-Colo, leyenda que podré contar a mis hijos: yo conocí un ídolo ❤.